viernes, 10 de agosto de 2012

ANSIEDAD DE SEPARACIÓN II (TIPS Y CONSEJOS)

Hacer las despedidas más fáciles

Estas estrategias pueden ayudar a los niños y a los padres a atravesar esta época difícil:
  • Elegir el momento adecuado. Intente no llevar a su pequeño a una guardería entre los 8 meses y 1 año de edad, cuando es más probable que aparezca la ansiedad de separación por primera vez. Además intente no separarse de su hijo cuando éste pueda estar cansado, con hambre o nervioso. Si es posible, programe el momento de su partida después de las siestas y las comidas.
  • Practicar. Haga prácticas con su hijo para separarse de él y para que vaya conociendo poco a poco a las personas y los lugares nuevos. Si piensa dejar a su hijo al cuidado de un familiar o una nueva canguro, invite a la persona antes para que pasen un tiempo juntos mientras usted está presente. Si su hijo va a empezar a ir a una nueva guardería o colegio, visiten el lugar juntos unas cuantas veces antes de que se dejarlo todo el horario completo. Practique dejando a su hijo con un cuidador durante cortos períodos de tiempo, para que pueda acostumbrarse a estar separado de usted.
  • Transmita tranquilidad y sea coherente. Cree un ritual para irse, de modo que pueda despedirse de un modo agradable, amoroso y sin vacilaciones. Transmita a su hijo serenidad y confianza. Tranquilícelo comunicándole que va a volver y explíquele cuánto tardará en regresar con conceptos que su hijo pueda entender (por ejemplo, después de comer), porque todavía no puede comprender la noción de tiempo. Concédale toda su atención al despedirse, y cuando diga que se va, hágalo; si vuelve, sólo empeorará las cosas.
  • Cumpla sus promesas. Es importante que regrese en el momento en que le ha prometido hacerlo. Esto es esencial; de esta manera, su hijo desarrollará la confianza de que puede afrontar ese tiempo de separación.
Por muy difícil que le resulte separarse de su hijo cuando éste llora y grita llamándole, es importante que confíe en que la persona que lo cuida podrá hacerse cargo de la situación. Puede ser de ayuda para usted y el niño que establezca una hora a la que llamará para comprobar que todo anda bien, quizá entre unos 15 y 20 minutos después de haberse ido. En ese tiempo, la mayoría de los niños ya se habrán calmado y estarán jugando con otras cosas. ¡No se permita ceder enseguida ni llamar antes de lo programado!
Si usted está cuidando al hijo de otra persona que está experimentando ansiedad de separación, intente distraer al niño con una actividad o juguete, o con canciones, juegos o cualquier otra cosa divertida. Quizá tenga que probar varias cosas hasta encontrar algo que atraiga la atención del niño.
Además, intente no mencionar al padre ni a la madre, pero responda a las preguntas del niño sobre sus padres de manera simple y sincera. Podría decirle: Mamá y papá volverán enseguida cuando acaben de cenar. ¡Vamos a jugar con este juguete!


Es sólo algo temporal

Recuerde que esta etapa pasará. Si a su hijo nunca lo ha cuidado nadie aparte de usted, si es tímido por naturaleza o está sometido a otros factores estresantes, la separación puede ser para él peor que para otros niños.
Confíe en su instinto. Si su hijo se niega a estar con algún canguro o a ir una determinada guardería o muestra otros signos de tensión, como dificultades para conciliar el sueño o pérdida de hambre, podría haber algún otro problema en con el lugar o la persona que lo cuida.
Si su hijo experimenta una ansiedad de separación intensa que se mantiene en la edad preescolar, la escuela primaria o más tarde y que interfiere con las actividades cotidianas, coméntelo con su pediatra. Esto podría ser un signo de un problema poco frecuente pero más serio que se conoce con el nombre de trastorno de ansiedad de separación.
Los niños con trastorno de ansiedad de separación tienen miedo de perder a sus familiares y a menudo están convencidos de que va a ocurrir algo malo. Hable con su médico si su hijo muestra signos de este trastorno, como:
  • síntomas de pánico (como náuseas, vómitos o dificultades para respirar) o crisis de angustia antes de que uno de los padres se vaya
  • pesadillas relacionadas con la separación
  • temor a dormir solo
  • temor excesivo a perderse o ser secuestrado o ir a los sitios sin los padres
En la mayoría de los niños, la ansiedad por separarse de sus padres se supera sin necesidad de atención médica. Pero si le preocupa el tema, hablé con su pediatra.

FUENTE;  http://kidshealth.org/parent/en_espanol/emociones/separation_anxiety_esp.html#

ANSIEDAD DE SEPARACIÓN

Las despedidas con llantos y rabietas son habituales en los primeros años de vida de un niño. Muchos niños, cuando alcanzan la edad de 1 año aproximadamente, desarrollan ansiedad a separación y se sienten mal cuando sus padres intentan dejarlos con otras personas.
Aunque la ansiedad de separación es perfectamente normal en el desarrollo de un niño, puede ser inquietante.
Entender lo que le está ocurriendo al niño y conocer algunas estrategias para enfrentar el problema puede ayudarles tanto a usted como a su hijo a atravesar estos momentos difíciles.

Cómo se desarrolla la ansiedad de separación

 

Los bebés suelen adaptarse muy bien a otros cuidadores. ¡Es probable que sientan más ansiedad por la separación los padres que el bebé! Mientras se satisfagan sus necesidades, la mayoría de los bebés menores de 6 meses aceptan fácilmente a otras personas.
Entre los 4 y 7 meses, los bebés desarrollan el sentido de permanencia de los objetos y aprenden que las cosas y las personas siguen existiendo aunque ellos no las vean. En ese momento los bebés empieza con el juego de "arrojar": tiran cosas al suelo desde una silla alta y esperan que un adulto se las recoja (y en cuanto las recuperan, ¡vuelven a arrojarlas!).
Lo mismo ocurre con los padres. Los bebés se dan cuenta de que sólo hay un papá y una mamá, y si no pueden verlos, para ellos significa que se han ido. Muchos todavía no entienden el concepto de tiempo, y por ello no saben si usted volverá ni cuándo volverá.
Tanto si está en la cocina, como en la habitación de al lado o en la oficina, para su bebé es lo mismo. Usted ha desaparecido, y hará todo lo que pueda para evitar que esto ocurra.

El estrés puede desencadenar ansiedad

Entre los 8 meses y 1 año de edad, los niños se vuelven cada vez más independientes, sin embargo, también aumenta en ellos la incertidumbre respecto a separarse de sus padres. En este momento es cuando se desarrolla la ansiedad de separación, y un niño puede ponerse nervioso y alterarse cuando uno de sus padres intenta irse.
Tanto si se trata de que usted vaya a la habitación de al lado sólo unos segundos, como de dejarlo con una canguro por la tarde o llevarlo durante el día a una guardería, su pequeño podría reaccionar llorando, aferrándose a usted y resistiéndose a ser atendido por otros.

La edad en la que aparece la ansiedad por separación puede variar de un niño a otro. Algunos niños pueden experimentarla más tarde, entre los 18 meses y los 2½ años de edad. Algunos nunca llegan a experimentarla. Y en el caso de otros, ciertos acontecimientos estresantes pueden provocar sentimientos de ansiedad respecto a separarse de sus padres: una situación nueva relacionada con la manera en que recibe los cuidados o un cuidador nuevo, el nacimiento de un hermano, mudarse a un sitio nuevo o tensiones en el hogar.

¿Cuánto dura la ansiedad de separación? Varía, dependiendo del niño y de cómo respondan los padres. En algunos casos, según sea la personalidad del niño, la ansiedad de separación puede durar desde la primera infancia hasta los años de la escuela primaria. En los casos en los que la ansiedad de separación interfiera con las actividades normales de un niño, puede ser una señal de que existe un trastorno más profundo de ansiedad de separación. Si la ansiedad de separación aparece de repente en un niño más mayor, podría haber otro problema, como acoso escolar o abusos o malos tratos.
La ansiedad de separación es diferente de los sentimientos normales que experimentan los niños mayores cuando no quieren que uno de sus padres se vaya. En esos casos, la angustia normalmente se supera si se distrae al niño suficientemente, y no volverá a presentarse hasta que el progenitor regrese y el niño recuerde que se había ido.

Y los niños comprenden el efecto que este comportamiento tiene sobre los padres. Si usted entra corriendo en la habitación cada vez que su hijo llora y luego se queda más tiempo o anula sus planes, su hijo continuará usando esta táctica para evitar la separación.

Qué siente usted

Durante esta etapa, usted podría experimentar diferentes emociones. Puede ser gratificante sentir que su hijo está tan apegado a usted como usted a él. Pero también es probable que se sienta culpable cuando se tome tiempo para usted, deje al niño con un cuidador o se vaya a trabajar. Y podría empezar a abrumarse por la cantidad de atención que su hijo parece necesitar.

Tenga presente que la resistencia de su pequeño a que usted se vaya es un signo bueno que indica que se ha producido un apego saludable entre usted y él o ella. Al final, su hijo logrará recordar que cuando usted se va siempre vuelve, y eso será suficiente para que se quede tranquilo mientras usted está fuera. Esto también permite que los niños desarrollen habilidades de afrontamiento y una cierta independencia.

lunes, 25 de junio de 2012

ENFERMEDADES RESPIRATORIAS: La importancia de detectarlas a tiempo

En invierno, las posibilidades de contagio aumentan. Antes de los dos años los niños son uno de los grupos etarios más afectados. El menor desarrollo de su aparato respiratorio, su sistema inmune inmaduro y su alta exposición a ambientes cerrados y hacinados, los hacen más vulnerables a este tipo de males.

Numerosas son las enfermedades que pueden aquejar a los más pequeños. En los meses de otoño e invierno las probabilidades de contagio de algún virus aumentan, en especial, cuando se trata de problemas respiratorios. Estos trastornos son causados por microorganismos que afectan las vías aéreas, es decir, fosas nasales, faringe, laringe y bronquios, entre las más comunes.
En el caso de los menores de dos años, su suceptibilidad a adquirir infecciones es mayor a la de los adultos, lo que los convierte en el grupo etario más afectado. Si nos centramos en ese grupo, antes de los seis meses el riesgo es aún mayor. Su aparato respiratorio está menos desarrollado y tienen un sistema inmune -encargado de protegernos contra las enfermedades- aún inmaduro.

 Las enfermedades más frecuentes

El contagio de los diferentes virus dependerá de la edad y condición en la que se encuentre el niño. Sin embargo, la doctora Lorena Cifuentes, pediatra de Red Salud UC, explica que "las dolencias más comunes en esta época son la bronquitis obstructiva; la laringitis obstructiva, en que se produce inflamación de la laringe, tos y afonía; la influenza; y otras complicaciones como la otitis media aguda o la neumonía".
Además, están aquellas enfermedades que están presentes durante todo el año. "El resfrío común y las rinofaringitis (inflamación de la mucosa nasal y
de la faringe) son frecuentes en los niños de esta edad. Ahora bien, los menores de seis meses son los que tienen más riesgos de contraer el virus sincicial y de presentar crisis bronquiales obstructivas en este periodo, por lo que hay que tener un mayor cuidado con ellos".

¿Cómo identificar el virus?

No todos los virus tienen un diagnóstico. En muchas ocasiones resulta, incluso para los expertos, difícil reconocer de qué microorganismo se trata. Sin embargo, la doctora Cifuentes asegura que algunos producen cuadros más típicos. "Por ejemplo, el virus sincicial se caracteriza por producir mucha coriza ("moquitos") y tos. El virus parainfluenza, que produce laringitis, se puede distinguir -en términos muy sencillos- por la tos de perro, con afonía y disfonía bastante intensa. La influenza la podemos identificar porque hay decaimiento, fiebre alta, dolor muscular y no siempre está acompañada de inflamación de la mucosa nasal".
De esta forma, es importante que los padres estén atentos a los síntomas de sus hijos, para evitar cuadros respiratorios graves y pasar un invierno sin complicaciones.

Cuándo recurrir a los servicios de urgencia

Los síntomas de los resfríos y otras molestias respiratorias son bastante comunes, por lo que pueden ser controlados y consultados por los padres a sus pediatras de manera anticipada. Así se evita llevar a los niños a los centros de urgencia por cualquier causa, pues en ellos se dan las condiciones necesarias para que los menores se contagien otras enfermedades. No obstante, hay síntomas de alerta que sí requieren atención inmediata. La respiración dificultosa, fiebre en los menores de un mes, decaimiento excesivo y la escasa reacción a estímulos deben ser consultadas de manera precoz. En estos casos los servicios de urgencia son la mejor alternativa.

Cómo prevenir el contagio en menores


  • Tener las vacunas al día.
  • No acudir a lugares hacinados y cerrados.
  • Mantener medidas básicas de higiene, como lavarse las manos.
  • Evitar la exposición al aire frío.
  • Ventilar por lo menos una vez al día los espacios al interior de la casa.
  • Evitar calefacciones que utilicen carbón, leña y parafina.
  • Evitar el cigarro en todo momento. El humo es dañino para la salud del menor.

Derribando Mitos

La medicina ha demostrado que:

  • Los cambios de temperatura NO producen las enfermedades respiratorias.
  • El uso de paracetamol, de manera anticipada, NO evita el contagio.
  • Los antitusivos NO siempre ayudan a disminuir la tos. Incluso, muchas veces no tienen efecto alguno.
  • Las mascarillas sólo sirven por pocos minutos. Por lo tanto, su uso prolongado NO tiene efectos preventivos.
FUENTE; REDCLINICA UC

jueves, 14 de junio de 2012

ENTREGA DE LECHE A NIÑOS DE HASTA 6 AÑOS Y EMBARAZADAS - En tu centro de salud mas cercano


¿En qué consiste el servicio?

Se entrega de forma gratuita  2 kilos de leche en cada control mensual de niño sano a menores entre 0 y 23 meses. 
Desde los 24 a los 72 meses, el control se realiza cada dos meses, oportunidad en que reciben 2 kilos de leche.
Para las embarazadas se entrega 1 kilo de leche mensual, pero si está bajo peso, recibe 3 kilos.
Una vez que se recupera, la cantidad queda definida en 2 kilos mensuales, luego de control con la matrona.

¿A quién está dirigido?

A todos los niños entre 0 a 6 años y a embarazadas inscritas en Fonasa o Isapres que tengan un Centro de Salud Familiar cercano a su residencia, donde se hace retiro del beneficio.

Requisitos
  • Estar  inscrito en el Centro de Salud Familiar.
  • Ser beneficiario de FONAS o Isapre (en esta última no corre el punto anterior).
  • Tener control de niño sano o  de embarazo al día, o acreditación con documento de su médico que realiza los controles de la embarazada o del niño.
Documentos necesarios
  • Credencial de FONASA o tarjeta de gratuidad.
  • Cédula de identidad.
  • Carné de control de salud del Centro de Salud Familiar.
  • Para el beneficiario Isapre, presentar documento que acredite control de salud al día (formuario MINSAL).
Para mayor información llame a Salud Responde de fonasa 600 360 7777 o al teléfono que la Isapre le proporcionó para hacer las consultas respectivas.

Localizador de Centros de salud mas cercano;


LOCALIZAR CENTRO DE SALUD MAS CERCANO




lunes, 11 de junio de 2012

Beneficios de la Lactancia Materna Exclusiva


Para el Niño(a)

a) Nutrición óptima.
b) Fácil digestibilidad.
c) Mayor protección inmunológica y menor frecuencia y gravedad de infecciones como diarrea, otitis e infecciones respiratorias.
d) Mejor desarrollo intelectual. Estudios han demostrado que existiría un coeficiente intelectual 2,6 puntos más altos en los niños(as) alimentados al pecho materno vs. los alimentados con fórmulas y esta diferencia se acentúa en los recién nacidos prematuros.
e) Mejor organización biocronológica y del estado de alerta.
f) Patrones afectivos-emocionales más adecuados.
g) Mejor desarrollo dento maxilar y facial. 



h) Menor frecuencia de trastornos alérgicos en el primer año de vida en los niños(as) con factores de riesgo (familiares de primer grado con enfermedades atópicas).
i) Menor riesgo de desarrollo de Diabetes Mellitus tipo 1, en niños(as) con antecedentes de familiares de primer grado con esta enfermedad.
j) Menor riesgo de obesidad en etapas posteriores de la vida, efecto que es proporcional a la duración de la lactancia materna.
k) Existe además fuerte evidencia científica en relación a que la lactancia materna podría disminuir el desarrollo de: meningitis, enfermedades inflamatorias intestinales, Diabetes Mellitus tipo 2, hipercolesterolemia, Linfoma de Hodgkin’s y trastornos de conducta alimentaria de la infancia. 


Para la Madre


a) Retracción precoz del útero.
b) Recuperación del peso, ayuda a perder grasa ganada durante el embarazo.
c) Prevención de cáncer de mamas y ovario.
d) Fortalecimiento de la autoestima materna.
e) Establecimiento del apego madre niño(a)
f) Satisfacción emocional de la madre.
g) Menor costo económico.
h) Probable menor riesgo de depresión posparto.

 Para la Familia



a) Refuerzo de lazos afectivos familiares, prevención del maltrato infantil.
b) Espaciamiento de los nacimientos.
c) Ahorro en alimentos y gastos por enfermedad.

Fuente; MINSAL

DECLARACIÓN DE LA OMS;
 
La lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses es lo mejor para todos los niños

Declaración
15 de enero de 2011
La OMS recomienda a todas las madres la lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses, con el fin de ofrecer a sus hijos un crecimiento, desarrollo y salud óptimos. Posteriormente, hasta los 2 años o más, los lactantes deben seguir con la lactancia materna, complementada con otros alimentos nutritivos.
En la última revisión sistemática sobre esta cuestión, publicada en 2009 (Kramer MS, Kakuma R. Optimal duration of exclusive breastfeeding (Review), The Cochrane Library, 2009, N.o 4), se incluyeron dos ensayos clínicos controlados y otros 18 estudios realizados en países tanto desarrollados como en desarrollo. Sus resultados respaldan las recomendaciones actuales de la OMS.
Dichos resultados indican que la lactancia materna exclusiva, sin otros alimentos ni líquidos, durante los primeros 6 meses de vida tiene varias ventajas en comparación con la lactancia materna exclusiva durante solo 3 a 4 meses, seguida de la combinación de la lactancia materna con otros alimentos.
Entre esas ventajas se encuentran, para el niño, una reducción del riesgo de infecciones gastrointestinales, y para la madre, una pérdida de peso más rápida tras el parto y un retraso del retorno de las menstruaciones. No se ha demostrado una reducción del riesgo de otras infecciones ni de enfermedades alérgicas. Tampoco se han documentado efectos adversos de la lactancia materna exclusiva durante 6 meses en el crecimiento, aunque en algunos países en desarrollo se ha observado una reducción de la concentración de hierro.
La OMS sigue atentamente los resultados de nuevas investigaciones y dispone de un procedimiento para reexaminar periódicamente sus recomendaciones. Las directrices se actualizan mediante revisiones sistemáticas acompañadas de una evaluación de la calidad de los datos, proceso que trata de garantizar que las recomendaciones hechas estén basadas en los mejores datos disponibles y no estén sujetas a conflictos de intereses.